Felipe Harman, como alcalde dejó a Villavicencio con la olla raspada.
Las condiciones económicas del gobierno de Villavicencio, no son las mejores. Señalan los entendidos en la materia, que el Alcalde Alexander Baquero, encontró » la olla raspada» por el accionar estrambótico de quién no solo exageró los gastos, sino también hizo compromisos económicos y financieros desbordados, originando serias dificultades, por la falta de recursos para atender las necesidades de la población, que requiere con urgencia obras prioritarias, especialmente en sectores periféricos, que están abandonados, ya que lo prometido no se cumplió y la sociedad señala inconformidad.