Fieles suben a monte Arafat de La Meca con mascarilla y desinfectante en mano
Riad (EFE).- Poco más de mil fieles musulmanes subieron hoy al monte Arafat, al este de La Meca, en autobuses, con la mascarilla puesta y desinfectante en mano, para realizar el ritual considerado como el momento culminante del «hach» (la gran peregrinación), esta vez menos concurrido por la COVID-19.
Desde el amanecer, cientos de peregrinos abandonaron sus hoteles para subir a los autobuses, no sin antes someterse a controles de temperatura, en dirección al monte Arafat, donde los musulmanes creen que el profeta Mahoma oró y pronunció su último sermón, el de despedida. Cada grupo de 50 fieles, liderado por un guía cuya tarea es garantizar el cumplimiento de las medidas sanitarias impuestas para prevenir la propagación del coronavirus, llegaron a la mezquita de Namira, aledaña al monte, para escuchar el sermón desde el lugar donde el profeta acampó antes de pronunciar su última oración. Dentro de la mezquita, cuya capacidad supera las 300.000 personas, poco más de mil peregrinos tomaron posiciones para escuchar el sermón del mediodía, separados por un metro y medio de distancia.