Angustioso llamado de los pobladores de Nueva Colombia a la FAO. “Estamos aguantando hambre”, dicen
Vista Hermosa. – Angustioso llamado a los organismo internacionales, especialmente a la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), hicieron los líderes del centro poblado Nueva Colombia, al señalar en un documento que alrededor de 350 familias “están aguantando hambre».
La solicitud de apoyo está respaldada por los líderes comunales de Nueva Colombia, que se ubica en la parte sur del municipio en límites con San José de Guaviare y de Puerto Rico (Meta).
Le cuentan a la FAO que el sustento básico de las familias se hace por vía fluvial en el río Guaviare, por donde se transportan los alimentos de la canasta familiar a un alto costo por la distancia y el valor del combustible, situación que hace que varias de esas familias no cuenten con los recursos económicos para adquirir los alimentos de primera necesidad, por lo que están pasando física hambre en este momento.
En el documento enviado a la FAO, aseguran que ellos como diseñadores de políticas y programas para poner fin al hambre mundial, deben saber que en ese territorio del sur del Meta existe una deuda histórica por parte del Estado con niños, niñas, adolescentes, jóvenes, mujeres y campesinos que hoy padecen condiciones precarias de acceso a servicios básicos y de alimentos para la supervivencia de sus familias.
“Nuestra situación requiere de una atención humanitaria urgente…”, aseguran los habitantes de la región del Guayabero en Vista Hermosa, en su carta enviada a la FAO.
Los habitantes de Nueva Colombia aseguran que atraviesan por una crisis humanitaria sin precedente, dado que no solo dejaron el cultivo de la coca porque no hay quien la compre, sino que no cuentan con producciones de pancoger suficientes para su mínima subsistencia.
“La posibilidad de tener productos de pancoger es compleja por la baja fertilidad del suelo o por no existir los medios de asistencia técnica y apoyo para la producción, como semillas, insumos, materiales y abonos o programas que motiven a la población a cultivar alimentos, que reemplacen el cultivo de la coca, único medio de subsistencia desde hace varias décadas en la zona…”, se advierte.