Colombia regresa a la calma tras protestas que Duque trata de apaciguar
Bogotá. (EFE).- Colombia sigue en mitad de la crisis desencadenada por más de dos semanas de protestas, mientras el Gobierno trata de ceder en algunas de las demandas para apaciguar el descontento social que vive el país e insiste en invitar a una mesa de diálogo a los convocantes del paro nacional.
La jornada, que transcurrió tranquila sin apenas concentraciones o marchas en las ciudades colombianas por primera vez en 16 días, la abrió la confirmación de la renuncia de la canciller Claudia Blum, la segunda ministra que se baja del carro del Gobierno.
Así, tras varios días de especulaciones y sin dar ninguna razón por la decisión, la canciller se suma al ya exministro de Hacienda Alberto Carrasquilla, artífice de la reforma fiscal que sacó a decenas de miles de personas a la calle el 28 de abril.
Además, «se habla posiblemente también de otros cambios que podrían venir en el futuro cercano» en la Administración de Duque.
Las protestas, que comenzaron el 28 de abril contra la ya extinta reforma fiscal y se han cobrado 42 víctimas mortales (41 civiles y un policía), según lo reportado a la Defensoría del Pueblo, han derivado en un sinfín de peticiones que se podrían resumir en el descontento por las políticas neoliberales del Gobierno y la brutalidad policial con la que ha actuado las fuerzas de seguridad.
Sin embargo, en las calles, tomadas sobre todo por gente joven de barrios de estratos bajos y medios, dudan de la relevancia del Comité Nacional del Paro como interlocutor ante sus demandas.
Por eso, el Gobierno también ha intentado otras formas, como reuniones con jóvenes o anunciar la gratuidad para el segundo semestre de 2021 de la matrícula para las universidades públicas e institutos de educación superior a quienes proceden de estratos 1, 2 y 3, es decir, los barrios más pobres.
En Barranquilla se presentaron desmanes en inmediaciones del Estadio Metropolitano, mientras se jugaba el partido entre Mineiro y América que perdió éste último. EFE