El Guainía en selva colombiana, se blinda por COVID-19 en Brasil y Venezuela
INIRIDA. (EFE).- El Guainía, fronterizo con Venezuela y Brasil, trabaja aceleradamente para proteger a 44.500 habitantes, principalmente indígenas, de las demoledoras consecuencias del coronvirus que aún no ha llegado a este alejado territorio.
Guainía no cuenta con vías terrestres que la comuniquen con el resto del país y los 688 kilómetros que separan a Bogotá de la capital departamental, deben cubrirse en avión, aislamiento que es al mismo tiempo una ventaja para evitar el contagio y un obstáculo cuando hay una urgencia. «Hoy podemos decir que hay cero casos positivos dentro del departamento a pesar de que tenemos dos fronteras con un altísimo riesgo, como lo son Venezuela y Brasil», dijo el gerente del Hospital Manuel Elkin Patarroyo, de Inírida, Álvaro Enrique Morales.
Brasil, con 22.000 muertos y más de 360.000 casos confirmados, es el segundo país del mundo con mayor número de infectados, en tanto que Venezuela ya tiene 1.010 enfermos y mantiene la cifra de víctimas mortales en diez. De los 32 departamentos de Colombia, Guainía, Guaviare y Vichada, todos entre la Amazonía y la Orinoquia, son los únicos que no tienen casos confirmados de COVID-19.
Guainía, que con 72.238 kilómetros cuadrados es el quinto departamento más extenso de Colombia pero el segundo menos poblado, recibió la donación de una carpa hospitalaria por la Empresa Prestadora de Salud (EPS) Coosalud. La carpa, que cuenta con 13 camas, botiquín y camilla de emergencia, sistema de iluminación tipo led, aire acondicionado y planta eléctrica, entre otros insumos, fue un alivio para el departamento donde la atención de los servicios de salud es precaria.
La instalación se hizo en un espacio contiguo al hospital Manuel Elkin Patarroyo y para ello se contó con el apoyo logístico de las Fuerzas Militares, la Gobernación del Guainía y la Alcaldía de Inírida.
El departamento también recibió 10 concentradores de oxígeno que tienen la ventaja de ser móviles para atender a la población que está dispersa por el selvático territorio.
El hospital adecuó también una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), la primera en esta región que hoy cuenta con siete camas, ocho respiradores, un electroencefalógrafo, un equipo de diagnóstico para órganos y otro para toma de signos vitales donados por la Gobernación, la Alcaldía, la Organización Panamericana de Salud (OPS) y una entidad privada.EFE