El virus de la violencia se cobra la vida de 95 líderes sociales en Colombia
Bogotá. (EFE).- La violencia contra los líderes sociales se incrementó en Colombia durante el primer semestre del año, periodo marcado por la cuarentena contra el coronavirus durante el cual fueron asesinados 95 de ellos, un 61 % más que en el mismo periodo de 2019.
La denuncia la hizo el programa no gubernamental Somos Defensores en su informe semestral titulado «El virus de la violencia», que señala que las medidas de aislamiento social impuestas para mitigar la covid-19 no solo no impidieron las acciones violentas contra los líderes sociales sino que, por el contrario, estas se recrudecieron.
«Escogimos este nombre tomando la imagen de la época que hemos vivido de pandemia que nos ha marcado todo el año», dijo la coordinadora de Somos Defensores, Lourdes Castro García, en la presentación del estudio.
Castro criticó la respuesta del Gobierno a la violencia contra líderes sociales y defensores de derechos humanos y afirmó con ironía que al analizar el contexto de la situación consideran «que ante este virus de la violencia el Gobierno se ha estado lavando las manos, siguiendo muy bien la medidas de bioseguridad, y se ha tapado la boca en términos de reaccionar adecuadamente».
Según el estudio, de los 95 asesinatos de líderes cometidos en el primer semestre, «el 48 % del total se produjo en la etapa de confinamiento» que comenzó el 25 de marzo y se prolongó por más de cinco meses aunque con flexibilizaciones para amortiguar el coste económico. Ayer fue asesinado otro líder social en el Norte de Santander.
Sobre la responsabilidad de los atacantes, el estudio reveló que de las 463 agresiones el 37 % es de autoría desconocida, el 30 % fue atribuido a grupos paramilitares, el 12 % a la fuerza pública, el 10 % a disidencias de las FARC, el 6 % al Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el 5 % a la Fiscalía, como entidad encargada de las acciones de judicialización. Las agresiones «cubren prácticamente todo el territorio nacional» porque ocurrieron en 29 de los 32 departamentos del país, lo que supone un aumento en comparación con las ocurridas entre enero y junio de 2019, que se dieron en 28 departamentos.
El más afectado es el Cauca, en el suroeste, donde ocurrieron 90 de los casos documentados, seguido de Antioquia (65), Cundinamarca (48), La Guajira (40), Norte de Santander (28), Valle del Cauca (26), Cesar (23), Arauca y Putumayo (20 cada uno).»La tendencia de mantiene: Cauca y Antioquia son los departamentos que siguen concentrando el mayor número de agresiones y concentran también el mayor número de homicidios líderes sociales», manifestó la coordinadora de Somos Defensores. EFE