¿Qué debe saber sobre la hinchazón en las piernas?

Si notas hinchazón en tus pies o piernas, definitivamente debes informar a tu médico de atención primaria. La hinchazón o el edema pueden ser causados ​​por muchas cosas y es importante tratar de comprender cuál es la causa.

«Si las personas ven enrojecimiento, ampollas o hinchazón en las piernas, especialmente si está empeorando, definitivamente necesitan ver a su médico», dice el especialista en medicina vascular en la Clínica de Cleveland John Bartholomew, MD.

Cuando hable con su médico, asegúrese de mencionar si notó qué hace que la hinchazón mejore o empeore. Su médico querrá saber cuánto tiempo ha estado presente y si ha habido algún cambio en el patrón de hinchazón.

Buscando una causa

Algunos pacientes son enviados a un especialista en medicina vascular para evaluar su hinchazón. Durante su primera visita, su médico entrará en un modo de detective para determinar cuál podría ser la causa.

«Comenzaré haciendo muchas preguntas sobre su historial médico», dice el Dr. Bartholomew:

¿Tienen problemas cardíacos, renales, hepáticos o tiroideos?

¿Artritis?

¿La hinchazón está en una pierna o en ambas?

¿Podría ser por un medicamento? ¿Es dolorosa la hinchazón?

Los medicamentos comunes relacionados con la hinchazón de las piernas incluyen algunos medicamentos para la presión arterial y el dolor.

“También podría preguntarle si tuvo una cirugía u hospitalización reciente y si viajó o si sufrió alguna lesión”, dice el Dr. Bartholomew.

Su médico le examinará las piernas y le preguntará a qué hora del día empeora la hinchazón, qué parece desencadenarla y qué ayuda a aliviarla:

¿Dónde está la ubicación de la hinchazón?

¿Afecta el pie y los dedos de los pies o comienza en el tobillo?

¿Hasta dónde se extiende la pierna?

¿Hay algún cambio en el transcurso del día y mejora de la noche a la mañana?

Otras preguntas que su médico puede hacer:

Sueño: ¿Cuánto tiempo duermes por la noche? ¿Duermes en la cama? Algunas personas duermen en un sillón reclinable, pero eso significa que en realidad no están elevando las piernas por la noche, lo que reduce la hinchazón. Si duermes ocho horas, ¿haces las ocho seguidas o te levantas y miras la televisión un rato antes de volver a la cama?

Niveles de actividad: ¿Pasas todo el día sentado frente a una computadora o mirando televisión con las piernas hacia abajo? ¿Caminar te deja sin aliento? Muchas personas desarrollan problemas para caminar a medida que envejecen y solo dan unos pocos pasos de una habitación a otra. Esto significa que no están usando el músculo de la pantorrilla, lo que ayuda a bombear líquido fuera de las piernas.

¿Tiene sobrepeso? La obesidad puede empeorar la hinchazón y puede hacer que sea más probable que sea sedentario, tal vez incluso andar en scooter en público.

“Muchas personas aumentan de peso tan pronto como comienzan a usar un scooter”, dice el Dr. Bartholomew.

Ingesta de sal: es posible que no agregue sal a sus alimentos, pero ¿sabe que muchos alimentos tienen un alto contenido de sal? ¿Come muchas cosas de lata? ¿Y el ketchup? Fiambres? ¿Perritos calientes? ¿Ayudante de hamburguesa o Rice-A-Roni? Todo eso está cargado de sal.

Cambios en los medicamentos: algunos medicamentos pueden causar hinchazón, especialmente si la hinchazón afecta a ambas piernas.

Hormonas: si es una mujer más joven, ¿la hinchazón ocurre en ciertos momentos de su ciclo mensual?

¿Cuál es la mejor forma de tratar la hinchazón de las piernas?

Hay varias formas de tratar la hinchazón de las piernas. Lo primero que su médico puede probar son diuréticos o píldoras de agua. Este puede no ser el mejor tratamiento, especialmente si la hinchazón no se debe a un volumen excesivo.

“A menudo, usar contrapresión o medias de compresión para ayudar a expulsar el líquido de las piernas es el tratamiento más eficaz”, dice el Dr. Bartholomew.

Otra opción, que se usa para tratar el linfedema, es utilizar una técnica llamada terapia descongestiva completa que implica el uso de masajes para expulsar el líquido, junto con ejercicios y una envoltura de baja compresión. Esto también se conoce como drenaje linfático manual.

Algunas personas caminan cojeando debido a la obesidad o la artritis, por ejemplo, por lo que el músculo de la pantorrilla no puede empujar el líquido cuando caminan. Estos pacientes pueden ser enviados a fisioterapia para ayudar a desarrollar la fuerza muscular y ayudarlos a caminar.

Algunas personas con hinchazón leve pueden decidir no tratarla. Por ejemplo, una persona mayor que vive sola y lucha por ponerse una media de compresión rígida podría decidir que no vale la pena la frustración. Existen dispositivos especiales conocidos como donantes que pueden ayudarlos a superar este problema.

«Si no les molesta, estamos de acuerdo, pero les pediremos que regresen si empeora», dice el Dr. Bartholomew. «Pero si dicen que la hinchazón es tan fuerte que no pueden ponerse los zapatos, les diremos que realmente necesitan usar las medias».

EA (Foto: Pixabay)